Reflexiones desde la sombra.
Hoy empieza mi cuarta semana de trabajo y me han vuelto a poner a la sombra. Es decir, que vuelvo a estar escuchando llamadas de compañeros con mas experiencia o cogiendo llamadas bajo su tutela.
Ayer, el ultimo día de mi tercera semana, practicamente me obligaron a salir de la sombra. Me puse al teléfono y empecé a hablar en Ingles y a pasearme de un lado a otro (virtual y físicamente) buscando respuestas.
La verdad creo que lo hice bastante bien. Las llamadas que recibí no eran nada corrientes, mas bien extrañas. Aun así, en todos los casos hice lo que se suponía debía hacer.
Salvo en uno.
Lo hice todo bien salvo una de mis preguntas durante una de las llamadas. Una pregunta que no duro mas de 3 segundos y que me ha devuelto a la sombra.
Tan grave era la cosa? La verdad es que la pregunta iba en contra de las normas de seguridad… se me ocurrió preguntarle un password a una de las personas que llamaban…
MAAAAAAAAAL. MUUUUUUY MAAAAAAAL.
Los passwords no se preguntan!!!
En su contexto, la pregunta no era tan descabellada. Pero esa no es la cuestión ahora.
La cuestión es que después de esto vino una chica “de calidad” a explicarme que no se podía hacer eso.
Hasta aquí todo normal. Te equivocas, te corrigen y todos tan contentos.
A pesar de que ya me habían dado el toque, al final del día me dijeron que, además, me tenían que poner a la sombra unos días. Pero por que? Al final, si hay alguien que seguro no volverá a preguntar un password a nadie soy yo. Entonces, por que?
Pues muy sencillo, tuve la mala suerte de estar hablando con alguien cercano a un superjefe de Zurich, que a su vez es cercano a mi superjefa de aquí. Y como la superjefa se debió llevar una buena bronca, se desahogo mandándome a la sombra unos días.
Al final lo de estar en la sombra no es tan malo. Trabajas menos, actualizas tu blog, te tomas descansos largos, estiras las piernas. Pero aun así, es un poco putada que te castiguen por algo que nadie te había dicho que estaba mal.
Lo único que espero es que se le pase el cabreo pronto a la jefa, porque tengo que empezar a pensar en pedir vacaciones, no?