El maravilloso mundo del Çay

Es imposible ser consciente del concepto Çay (Chai en teclados ingleses) hasta que no se ha visitado este pais rebosante de turcos y de su fiel escudera la cultura turca.

El Chai es el te tipico de aqui. Se prepara en una doble tetera (una con el Chai y otra con agua) y se bebe en vasos muy tipicos, pequenyitos y con forma de mujer (como la botella de cocacola, pero sin el cuello) Pero la magia de este elemento no esta ahi, si no en el uso que los turcos hacen de el.

Vas por las zonas turisticas, y los vendedores te invitan a Chai. Aunque no vayas a comprar nada.
Vas por las zonas no turisticas, y la gente sentada en la calle te llama, te hace sentarte a base de gestos (porque no habla ingles) y te invita a un Chai. O a dos si con los gestos hay buena comunicacion.
Vas por un sendero en la montanya, con 5 litros de agua en la mochila y una familia de picnic, te invita a te (siguiendo el protocolo de las zonas no turisticas) y encima obliga a los ninyos a darte la mazorca de maiz que tan agusto se estaban comiendo.
Estas acampado en la playa, a 300 metros de la familia mas cercana y vienen a invitarte a Chai. Si por cualquier cosa no acudes, al dia siguiente te repiten la invitacion.
Vas a un cibercafe, y cuando le preguntas al encargado (absoluto desconocedor del mundo de la informatica) que porque no funciona el ordenador, te trae un Chai y llama al S_abio_ (del que ya hablare en otro momento)
Estas en un cibercafe, que funciona perfectamente, y te traen un Chai.

Para que os hagais una idea de la magnitud de este fenomeno, Ali, el padre de familia del que hable en The Asian Side, toma, consume o enguye (segun considereis) entre 40 y 25 Chais diarios segun el frequito que haga ese dia.

Alrededor del Chai, no hay problemas, no hay preocupaciones, no hay impaciencia. Solo hay Chai. Con o sin azucar.